Saturday, October 3, 2009

Languidecer


No sé si sea o no un ejercicio estéril pretender cambiar el concepto de belleza que va creando la humanidad. En ello inciden demasiadas referencias culturales. Lo que sí me hace alucinar es cómo esa dictadura del cuerpo que se impone sobre todo a las mujeres termina siendo una farsa.

Belleza, juventud y erotismo se han unido en el capitalismo como fórmula de la plenitud, imponiendo así un simulacro de seducción como modo de vida. Y sin embargo, el deseo parece ser otra cosa. Algo que está en otra parte.

Pienso, por ejemplo, en la última versión de erotismo con la que me topé anoche: Tendrá como 19 años, pero para mí es una niñita; una niñita cuyo aspecto me rayaba en lo cómico. No sé si sería el push up bra radical, insuficiente para contribuir a su causa. Acaso era el conjunto de todo: maquillaje, uñas larguísimas con flores de colores, escasez de ropa. Todo en ella era excesivo. Todo rompía con las reglas más básicas de la moda. Además, se ubicaba en la foto con la posición estándar de la bailarina de reggaetón. No es que estén bailando. Es que así posan. Se inclinan, levantan el nalgaje exageradamente y ponen cara de mujer fatal. Ok. Es la estética de una generación.

La veo en Facebook. Me mira como quien pretende provocar deseo. Y sin embargo, con todo y su pose, con todo y su empeño, esta niña me parece que está aburridísima. Quiere que alguien la desee, se esfuerza para ello como lo hacemos todas de tantas maneras. Pero, paradójicamente, ella no parece desear a nadie.

Mi niña es la metáfora perfecta de estos tiempos de erotismo mercantil. Y mientras más sobre expuestos están el cuerpo y el sexo, menos deseo parece haber entre la gente, a juzgar por los datos publicados tan a menudo en diarios como éste. Según indican, la actividad sexual se reduce sustancialmente en la vida moderna.

Si la revolución sexual marcó la liberación del cuerpo tras siglos de represión cristiana, en la actualidad occidental, el cuerpo no sólo se libera: se sobre consume. Para luego languidecer.

 

No comments:

Post a Comment